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miércoles, agosto 21, 2019

Zapatos italianos | Henning Mankell



 Siempre me siento más solo cuando hace frío.
El frío del exterior me hace pensar en el de mi propio cuerpo. Me veo atacado desde dos frentes. Pero yo no dejo de oponer resistencia contra el frío y contra la soledad. De ahí que, cada mañana, salga a cavar un agujero en el hielo. Si alguien me observase desde la helada bahía con unos prismáticos, creería que estoy loco y que lo que hago es preparar mi propia muerte. ¿Un hombre desnudo en el gélido frío invernal, con un hacha en la mano cavando un agujero en el hielo?
En realidad, tal vez sea lo que espero, que un día haya alguien ahí fuera, una negra sombra que se recorte contra la inmensa blancura que me rodea, que me mire y se pregunte si llegará a tiempo de intervenir antes de que sea demasiado tarde. Pero no necesito que nadie me salve, puesto que no tengo intención de suicidarme.
Hace años, cuando la gran catástrofe, la desesperación y la ira se apoderaban de mí con tal violencia que, en alguna ocasión, sopesé la posibilidad de acabar con mi vida. Pero jamás lo intenté. La cobardía ha sido siempre para mí una fiel compañera. Entonces, como ahora, pensaba que la vida consiste en no cejar. La vida es una frágil rama que se mece sobre el abismo. Y seguiré colgado de ella tanto tiempo como yo mismo resista. Después me precipitaré al fondo, como todos, y no sé qué me espera. ¿Habrá algo sobre lo que caer o no existirá nada más que una oscuridad fría y dura precipitándose hacia mí?


Alucinado con esta gran historia que en ningún momento pensé que saliese de la cabeza de Henning Mankell, no porque dudase de su capacidad, sino porque pensé que solo escribía novela negra. El autor crea una historia donde aborda temas como la soledad, la enfermedad, el dolor, reencuentros, segundas oportunidades, el perdón… Un libro superrecomendable que todos los amentes de la lectura deberíamos de leer por lo menos una vez en la vida.

domingo, febrero 28, 2010

El Chino por Henning Mankell


Skare, frío intenso. Mediados de invierno.
Uno de los primeros días de enero de 2006, un lobo solitario cruza la frontera sin señalizar y llega a Suecia desde Noruega a través de Vauldalen. El conductor de un ciclomotor cree haberlo avistado a las afueras de Fjällnas, pero el lobo se esfuma por entre los bosques en dirección este sin que nadie logre ver hacia donde se dirige. En medio de los valles noruegos de Österdalarna, el animal encontró restos de un cadaver de alce congelado dondeaún quedaban huesos por apurar. Sin embargo, de eso hacía más de dos días. Ahora empieza a acusar el hambre de nuevo y busca alimento.
Es un macho joven en busca de un territorio propio. Y continúa avanzando incansable hacia el este. Cerca de Nävjarna, al norte de Linsell, el lobo encuentra otro cadáver de alce. Durante un día entero permanece junto a él hasta saciar su hambre antes de proseguir. Siempre hacia el este. En las inmediaciones de Karböle atraviesa a la carrera la helada superficie del Ljusnan y sigue el río en su accidentado discurrir hacia el mar. Una noche de luna clara, se mueve sobre sus mudas patas por el puente de Järvsö para adentrarse después en los espesos bosques que se extienden hacia el mar.
La mañana del 13 de enero, muy temprano, el lobo llega a Hesjövallen, un pequeño pueblo al sur de Hansesjön, en la región de Hälsingland. Se detiene y olfatea. Percibe un olor a sangre de origen indeterminado. El lobo otea a su alrededor. En las casas vive gente, pero de las chimeneas no sale humo. Ni su aguzado oído siente sonido alguno.
Sin embargo, ahí se percibe el olor a sangre, el lobo está seguro de ello. Aguarda en el lindero del bosque, intenta olfatear de donde procede. Después comienza a correr despacio por la nieve. El olor llega arrastrándose desde una de las casas que se alza en los confines del pueblecito. Está alerta, en las proximidades del hombre hay que ser tan cauto como paciente. Se detiene de nuevo. El olor procede de la parte posterior de la casa. El lobo aguarda. Finalmente se pone en movimiento…


Me encanta las historias de Mankell y sobre todo el inicio de su novelas, este relato hacía años que tenía ganas de leerlo y por fin ha caído. En este libro nos vamos a encontrar un argumento distinto a lo que este autor nos tiene acostumbrado, no va a ser tan policiaco como la saga de La Quinta Mujer…, y me gusta. El que quiera leer este libro se encontrará con supense pero también con con algo más, política, entretenimiento, denuncia y una China que en breve cobrará muchísima importancia en el futuro de todos.

viernes, agosto 21, 2009

La reina en el palacio de las corrientes de aire


Poco antes de la una y media de la madrugada, la enfermera Hanna Nicander despertó al doctor Anders Jonasson.
-¿Qué pasa?- preguntó éste, confuso.
-Está entrando un helicóptero. Dos pacientes. Un hombre mayor y una mujer joven. Ella tiene heridas de bala.
-Vale - dijo Anders Jonasson, cansado.
A pesar de que sólo había echado una cabezadita de más o menos media hora, se sentía medio mareado, como si lo hubiesen despertado de un profundo sueño. Le tocaba guardia en el hospital de Sahlgrenska de Gotemburgo y estaba siendo una noche miserable, extenuante como pocas. Desde que empezara su turno, a las seis de la tarde, habían ingresado a cuatro personas debido a una colisión frontal de cocheocurrida en las afueras de Lindome. Una de ellas se encontraba en estado crítico y otra había fallecido poco después de llegar. También atendió a una camarera que había sufrido quemaduras en las piernas a causa de un accidente de cocina ocurrido en un restaurante de Avenyn, y le salvó la vida a un niño de cuatro años que llegó al hospital con parada respiratoria tras haberse tragado la rueda de un coche de juguete. Además de todo eso, pudo curar a una joven que se había caído en una zanja con la bici. Al departamento de obras públicas del municipio no se la había ocurrido nada mejor que abrir la zanja precisamente en la salida de un carril bici, y, además, alguien había tirado dentro las vallas de advertencia. Le tuvo que dar catorce puntos en la cara y la chica iba a necesitar dos dientes nuevos. Jonasson también cosió el trozo de un pulgar que un entusiasta y aficionado carpintero se había arrancado con el cepillo.


Se terminó la trilogía y este tercer tomo sigue la misma línea de los otros dos, muy entretenido, una prosa rápida y directa creada única y exclusivamente para agradar, amenizar, deleitar… osea que de esta trilogía no espéreis más. Me quedo con Lisbeth Salander un personaje que desde su aparición en el relato me encantó. Y como todos sabéis aquí se termina Milenium aunque creo que hay un cuarto libro, bueno unas cuantas páginas, se editará, alguien tomará el relevo?
Decir que a los que les guste este tipo de literatura que no se preocupen porque si dan una patada aparecen bastantes autores suecos que lo hacen igual de bien o mejor. Yo ospropongo a uno Henning Mankell del que hemos hablado anteriormente.

sábado, junio 13, 2009

La Leona Blanca | Henning Mankell


La corredora de fincas Louise Akerblom salió del bancon Sparbanken de Skurup poco después de las tres de la tarde del viernes, 24 de abril. Se detuvo unos instantes en medio de la acera e inspiró profundamente el ire fresco, mientras pensaba qué iba a hacer. Lo que más le apetecía era dar ya por concluida la jornada laboral y dirigirse en automóvil hasta su casa en Ystad. Por otro lado, le había prometido a una viuda que llamó por la mañana que se pasaría a ver una casa que la señora tenía intención de poner en venta. Intentaba calcular cuánto tiempo le llevaría la visita. Una hora más o menos. se dijo, seguro que no más de una hora. Además, tenía que ir a comprar pan. En condiciones normales, era su marido, Robert, quien se encargaba de hornear todo el pan que necesitaban; pero precisamente aquella semana el hombre no había tenido tiempo, así que Louise cruzó la plaza y giró a la izquierda hacia la panadería. Un timbre anticuado tintineó cuando abrió la puerta. Era la única cliente y la dependienta, Elsa Person, recordaría más tarde su aparente buen humor y sus comentarios acerca de lo agradable que era el que la primavera se hubiese decidido a llegar por fin.
Compró pan de centeno y se le ocurrió dar una sorpresa a la familia con unos bollos de merengue y caramelo para el postre. hecho esto, regresó al banco, en cuyo aparcamiento, situado a la espalda del edificio, había dejado el coche. Se cruzó por el camino con la joven pareja de Malmö que acababa de comprarle una casa y que había estado en el banco hasta entonces, concretando los detalles de la compra, pagando al vendedor y firmando el documento de compra venta y la hipoteca.


La verdad es que en un principio si que me interesó la trama pero en el momento que empiezan a entrar a fondo en la temática de sudáfrica como que ya me empezó a cansar o a agotar un poquito. De Henning Mankell leí hace muchísimo La Quinta Mujer y la verdad es que me sorprendió gratamente. A Mankell lo podemos catalogar dentro de los escritores de novela negra suecos como el archifamoso Larson.
La Leona Blanca como que no, trata sobre una joven agente inmobiliaria que debido a la mala suerte, estar en el sitio equivocado y a la hora equivocada, fallece asesinada mientras en Sudáfrica un grupo racista está decidido a no dejar atrás el apartheid. Lo único positivo que puedo comentar es el personaje de Wallander que está muy bien construido y creado. Si queréis leer algo de este autor creo que deberíais leer La Quinta Mujer, éste dejarlo para cuando os sobre mucho pero que mucho tiempo y lo querais desperdiciar.